Soliloquio en una noche estrellada.. .
.. . Cuando recuerdas a alguien que se ha marchado, de alguna forma le otorgas otra vez la vida.
Miro hacia el horizonte o hacia más arriba, hacia las estrellas
.. . percibo lo insignificantes que somos
.. .un corazón que palpita en medio del cosmos.
Me doy cuenta de que .. . lo nuestro, es sólo
un soplo. Unas cuantas hojas a menudo inconexas en
un libro infinito escrito por todos
.. . saber que cada una de nuestras vivencias forman
parte de ese minúsculo capítulo llamado humanidad.
Un manojo de ilusiones esperadas, algunas cumplidas y otras no .. .
.. . que nos mantienen vivos
Rebobinas tus recuerdos y te das cuenta de que
algunos que te acompañaron, ya no están aquí
Me pregunto, sí en este mismo momento hay alguien más
planteando esta misma temporalidad de la existencia.
Después de este lapsus íntimo de reflexión
.. . con el todo y con la nada, vuelves a mirar
hacia abajo, hacia lo que te rodea.
Es cuando reconoces la inmediatez de nuestro pequeño trayecto
y la fragilidad del entorno.
.. . replanteas tus esquemas.. .
Hay momentos únicos, irreproducibles. Aprovecha y comparterlos con los seres queridos. Esos que aún permanecen vivos, y a quienes les podemos brindar algunos minutos robados a la rutina.
Miro la Hora.. .
.. . entonces esa sensación aparentemente tan
revitalizante, desaparece. Te das cuenta de
que formas parte de una cadena de producción
que no permite ni siquiera parar y reflexionar.
.. para la cual todo esto que he pensado está formulado desde el limbo .. .
by JSBaenacock
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