No tenía muy claro que título ponerle a este post. Inicialmente, pensé que podría ser una cuestión del destino; rápidamente me desdije.. .
Como podría achacarle esta anécdota casual/accidental a algo tan fantástico o fantasioso como las fuerzas del destino?
__Si, yo creo en el libre albedrío.
Ante este dilema dicidí más bien titularlo.
"El despiste que me libró de destrozar mis manos.. ."
__ Exagero __ para ser más exáctos " .. .que me libró de lesionar la palma de mis manos".
Seguramente soy uno más de los que contribuyen a engrosar el numero de despistados sobre el planeta. Cuyo gen se transmite y se manifiesta de una forma dominante, de generación en generación. Curiosamente algunas personas nos concentramos excesivamente en algo puntual y nos despistamos en la misma proporción, con lo que no es tan relevante.
Aquel día.. .
.. . Corría por el paseo marítimo, sospechaba que había algo en mi indumentaria que no compaginaba con lo hacía.
Pero no fué hasta intentar coordinar el movimiento de mis manos con el de mi respiración, cuando descubrí, que iba corriendo con guantes.
__Que ocurrencia.. . Podría pensar algúno.. .
Pero ya había programado mi gestor de running. La idea de dar marcha atrás para dejarlos en el gimnasio, tampoco procedía, había recorrido una distancia significativa..
Así qué opté por continuar. Hasta qué ocurrió un traspiés.
__Si, lo sé. Estaba cantado.
Salir a correr con unos cordones que aún estando anudados, dejaban colgando al menos 10cms; no es un acto heroico, es más bien un suicidio.. propiciar una caída.
Y así ocurrió. Al intentar dar un giro de 180 grados para volver corriendo por donde vine, pisé los cordones, cargados de albero. El efecto, fue como pisar el freno de un fórmula uno, sobre suelo mojado. De repente, estaba saboreando la tierra que acababa de pisar. Había caído de bruces sobre el suelo. Pero por suerte, justo antes del aterrizaje forzoso, mis manos instintivamente, actuaron por reflejo, sustentando todo el peso de mi cuerpo: contrarestando la inercia que llevaba y amortiguando el golpe.
Entonces miré mis guantes, a uno de ellos le saltó hasta la pegatina de la marca.
__ jolin y __ estuve a punto de dejarlos.
Los guantes que olvidé remover antes de salir a correr, me habían librado, de lesionarme.
En estos casos, lo primero que nos viene a la cabeza, es preguntarnos si son cosas del destino o, una simple, pero salvadora casualidad.
__ o yo que sé__ jajaja
:)
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