🛸 El teslascopio: la ouija científica de Nikola Tesla ⚡
Mientras otros jugaban con velas y copas para hablar con los espíritus, Nikola Tesla tenía otra idea: hablar con el universo.
En 1899, desde su laboratorio en Colorado Springs, detectó unas señales repetitivas que no cuadraban con ningún fenómeno terrestre. ¿Rayos? ¿Ruido? ¿O… Marte? 🤯
Así nació su idea del teslascopio, un receptor de ondas electromagnéticas diseñado para captar mensajes del espacio exterior. No era magia. Era física. Alta frecuencia, resonancia, y mucha ambición.
Nunca se construyó del todo. Pero Tesla estaba convencido: no estamos solos, y si alguien iba a abrir el canal, sería él… con bobinas, no con tableros de ouija.
📡 Hoy, nuestros radiotelescopios buscan lo mismo: señales de vida entre las estrellas.
Tesla no jugaba con fantasmas. Quería conversación interestelar.
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